Cuando era un niño pequeño, Sufjan Stevens fue abandonado por su madre en una tienda, con la intención de no volver a verlo. Este acto era uno de los múltiples episodios de histeria de Carrie, su madre, una mujer que nunca logró adaptarse al rol de la maternidad y que siempre anhelaba una vida de excesos. Se convirtió en madre a una edad bastante joven.
A lo largo del tiempo, y debido a sus excesos, Carrie sufrió de bipolaridad, ansiedad y esquizofrenia. Stevens, por su parte, creció con el apoyo de su padrastro Lowell en una familia que, a simple vista, podría parecer “más o menos normal”. Sufjan era un “buen” niño que, al crecer, buscó refugio en la iglesia y en el temor a los castigos del infierno. No obstante, también era un joven introvertido que no aprendió a leer y escribir hasta el tercer grado, y que además padecía de déficit de atención.
Parte de esta compleja historia se relata en su álbum de 2015, Carrie & Lowell, una obra obligada no solo de la última década sino también de lo que llevamos de siglo. El álbum se caracteriza por su instrumentación cruda, complementada con sutiles adornos de teclado ambiental que subrayan la oscuridad y el frío emocional del disco. Es, en pocas palabras, una tristísima obra maestra.
Sin embargo, Carrie & Lowell se centra más que nada en la presencia, y más significativamente, en la ausencia de su madre hasta su fallecimiento a causa de cáncer en 2012. Pero, ¿qué hay de Sufjan? ¿Qué hay de sus sentimientos al margen de su proceso de duelo? ¿Ha podido liberar las otras penas y traumas que acompañan una vida solitaria?
Javelin responde esa duda.
Javelin,entre lo devastador y resiliente. Crítica
Sufjan Stevens, el ícono del folk contemporáneo, es una figura inquieta en la escena musical. Según distintas fuentes, cuenta con 13 álbumes de estudio, aunque otros consideran que son 11. Algunas de estas obras son colaboraciones o experimentaciones que reflejan su fascinación eterna por la música, como su álbum de piano instrumental “Reflections”, lanzado este mismo año. Estos proyectos se pueden considerar como rarezas o caprichos personales, abarcando tanto música electrónica como folk, y en su mayoría son instrumentales. Esto sin mencionar los álbumes navideños que suele lanzar casi cada año, en los que con un sentido del humor agudo nos relata historias tiernas o cómicas.
Si tomamos entonces todos esos LP la cantidad se incrementa, sin embargo, en una especie de consenso crítico para diferenciar sus álbumes canónicos, tenemos que después de su primer obra maestra Illinois del 2005 (Aquí nuestra retro reseña) seguiría el album de indie y folktronica The Age Of ADZ de 2010, después el citado Carrie & Lowell de 2015, el experimental y electrónico The Ascension de 2020 y llegamos al 2023 con Javelin, rompiendo la racha de 5 años a partir de Illinois entre albumes canon. Aquí agregaría el excelente EP All Delighted People como un disco muy importante en su carrera que con 8 temas y una duración de una hora se puede considerar más que un EP.
Organizar la discografía de Sufjan Stevens se torna complejo a partir de 2005, ya que su carrera previa era más lineal en comparación.
Ahora bien, ¿por qué se habla de Javelin como el regreso de Sufjan a la música desde 2015 si en 2020 lanzó The Ascension? La razón es simple: se habla del regreso de Sufjan Stevens como cantautor, en el estilo que le dio fama con álbumes como Seven Swans, Michigan, Illinois y Carrie & Lowell—el Sufjan íntimo, creador de folk y música americana.
Javelin toma su nombre de la historia bíblica de Saúl y David, los dos primeros reyes de Israel. Un día, lleno de celos hacia David, Saúl arrojó una lanza contra él en dos ocasiones, preso de la envidia y el resentimiento.
Es importante señalar que Sufjan Stevens es un hombre profundamente religioso. The Atlantic alguna vez lo llamó “el músico cristiano más exitoso del mundo”. Sin embargo, aunque Stevens utiliza la Biblia en sus letras para construir sus propias metáforas, lo que realmente demuestra es ser un hombre en busca de la fe que siente haber perdido. Sus letras cuestionan a Dios y a menudo son ambiguas, pudiendo interpretarse como referencias bíblicas o como letras de amor dirigidas tanto a amantes del sexo opuesto como del mismo.
Javelin arranca con “Goodbye Evergreen” donde se despide de un lugar o de un amante. La canción es a delicado piano y coros femeninos que recubren la mayoría de temas y le otorgan otra capa a la música para que no se sienta tan desnuda como en 2015. Resalta la letra:
Something just isn’t right
I cut from the inside
I’m frightened of the end
I’m drowning in my self-defense
Now punish me
Think of me as what you will
I grow like a cancer
I’m pressed out in the rain
Deliver me from the poisoned pain.
(“Algo simplemente no está bien, Corté desde adentro, tengo miedo del final, Me estoy ahogando en mi propia defensa, Ahora castígame ,Piensa en mí como lo que quieras, Crezco como un cáncer , Estoy presionado bajo la lluvia, Líbrame del dolor envenenado”)
El tema que inicia como una melancólica despedida —que paradójicamente nos da la bienvenida al álbum— se transforma en su segunda mitad con percusiones electrónicas semiindustriales que se intensifican, pianos distorsionados, cajas de ritmo y clarinetes dulcemente introducidos hacia el final. Es un track de contrastes, pero lo suficientemente audaz como para señalar el regreso del mejor Sufjan Stevens.
“A Running Start” es una obra de guitarra campirana, piano y coros pastorales. Se mantiene tranquila la mayor parte del tiempo, hasta que en sus últimos minutos irrumpe un breve clímax de drum machines y cuerdas. La letra nos habla de un amor sostenido en la incertidumbre y fragilidad.
I see the light upon the lake
The silver moon, the water snake
A pair of eyes, a gentle breeze
Forgotten tales, a wild beast
I know, I know the time has come
To ask you for a kiss
Don’t go, my lovely pantomime
Receive of me my only wish
(“Veo la luz sobre el lago, La luna plateada, la serpiente de agua. Un par de ojos, una suave brisa. Cuentos olvidados, una fiera salvaje. Lo sé, sé que ha llegado el momento para pedirte un beso. No te vayas mi hermosa pantomima. Recibe mi único deseo”)
“Will Anybody Ever Love Me?” de la que ya hemos platicado en nuestras recomendaciones es la canción que más contiene el espíritu de Carrie & Lowell. La gran diferencia es que en el álbum anterior no existían percusiones o coros de respaldo. Esta pieza muestra a Sufjan mirándose con conmiseración, pidiendo que alguien lo ame de verdad. Es un himno del álbum, estructurado de manera pop. Y aunque la letra sigue siendo triste, las drum machines y los coros angelicales alivian musicalmente esa sensación de desolación lírica.
“Everything That Rises” es el track que más evoca los días de folktrónica e indietrónica de The Age Of ADZ. Ofrece un suave y equilibrado juego entre loops, cajas de ritmo, cuerdas y coros angelicales. Es una bella balada impregnada de culpa cristiana, una marca registrada de Stevens.
Jesus lift me up to a higher plane
(To a higher plane)
Can you come around before I go insane?
(Before I go insane)
Cast me not in hell, while my demons rage
(While my demons rage)
Turn yourself around to see what I can say
(To see what I can say)
(“Jesús, llevame a un plano más alto, A un plano más alto ¿Puedes venir antes de que me vuelva loco? ¿Antes de volverme loco? No me arrojes al infierno donde los demonios se enfurecen, Donde los demonios se enfurecen, Date la vuelta para ver qué puedo decir”)
“Genuflecting Ghost” parece más un canto eclesiástico, acercándose al gospel sin serlo. Los coros de respaldo, tanto masculinos como femeninos, así como las percusiones con campanas y escobillas, le confieren profundidad al tema, que culmina con loops y drum machines, además de hermosos arreglos de órgano y cuerdas.
En “My Little Red Fox”, encontramos una de las piezas de piano más hermosas en la discografía de Sufjan, que se complementa con emocionantes sonidos de platillos y metales, coros épicos y vientos en forma de clarinetes y flautas. Las secuencias electrónicas irrumpen y el tema adquiere una connotación celestial.
“So You Are Tired” fue el primer single del álbum y ya hablamos algo de él, y aunque ya hemos hablado de él, sigue siendo una canción profundamente melancólica acerca del cansancio emocional y los límites a los que podemos llegar para mantener cerca a personas que nos dañan. De nuevo, adopta deliberadamente la estructura de un himno celestial. Podría argumentarse que Sufjan Stevens ya ha perfeccionado la fórmula para introducir elementos en cada pista y alcanzar esos clímax emocionales, pero ese detalle pasa a segundo plano ante una obra tan redonda como esta.
“Javelin (To Have and Hold)”, el track homónimo del álbum, es una pista corta centrada en la envidia, o más específicamente, en los celos hacia la persona que se anhela. Acompañado de arpegios de piano y guitarra, Stevens muestra una de sus facetas más oscuras en este tema.
Searching through snow
For the javelin I had not
Meant to throw right at you
For if it had hit its mark
There’d be blood in the place
Where you stood
(“Buscando a través de la nieve por la jabalina, no había sido mi intención lanzarla directamente hacia ti. Si hubiera dado en el blanco ,Habría sangre en el lugar donde estabas paradx, Es un pensamiento terrible tenerla y sostenerla”)
“Shit Talk” es la canción más extensa del álbum y, a su vez, la más épica en escala. No solo por su duración, sino también por la amalgama de instrumentos, ritmos y cánticos. Es un tema que resume muchos de los trucos y estilos que hemos escuchado en este y otros álbumes del Sufjan más íntimo. Sin entrar en más detalles, te recomiendo que la descubras por ti mismo, especialmente porque funciona como una especie de síntesis de la colosal “Impossible Soul” de The Age Of ADZ, pero en menos de la mitad del tiempo. Además, contiene una de las letras más directas y sinceras en la carrera de Sufjan.
No more fighting
No more talking shit
Do as I say, not as I give up
Not as I’ve failed to live
In the future, there will be a terrible cost
For all that we’ve left undone
(“No más peleas, No más hablar de mierdas, Haz lo que te digo, no mientras me rindo. No porque no haya podido vivir, En el futuro habrá un costo terrible por todo lo que hemos dejado sin hacer”)
Y la letra es rematada por alguien que sabe lo que siente y quiere pero prefiere dar la vuelta ante la imposibilidad de mantener algo que ya está roto “I Will Always Love You Buy I Cannot Live With You” (Siempre te amaré pero no puedo vivir contigo)
Para concluir, “There’s A World” actúa como un bálsamo en un disco que suena otoñal e invernal, tanto en su ambiente como en su resonancia emocional. Con un arpegio encantador en su guitarra, Sufjan interpreta un reconfortante cover de Neil Young, ofreciendo un tono más luminoso tras el devastador tema anterior.
Look around it, have you found it
Walkin’ down the avenue?
See what it brings, could be good things
In the air for me and you
(“Mira alrededor, ¿Lo has encontrado?, Caminando por la avenida, Mira lo que trae, podrían ser buenas cosas en el aire para ti y para mí”)
Sufjan Stevens sigue siendo un tesoro. Post Reseña.
Regresamos a la pregunta que hacía de Javelin después de exorcizar los demonios de la muerte de su madre, ¿Qué hay de él?, ¿Qué vivencias trae después de los años?, Javelin nos contesta de manera magistral, nuestro artista ha vivido altibajos como se nota en las letras, y Javelin es un disco de corazones rotos pero también de súplicas amorosas correspondidas, es un disco de encuentros y desencuentros, tal cual, como la vida misma.
Como ya lo he mencionado, es un álbum otoñal e invernal. Es la clase de música que podrías escuchar mientras sientes cómo el aire frío golpea tu rostro o cómo tu corazón se congela.
También es un álbum distinto a cualquier otro que Stevens haya creado antes. Combina su tradicional enfoque folk y su estilo de cantautor con elementos de música electrónica. La obra esconde trucos y sorpresas que se revelan a lo largo de su duración.
Hoy, nos encontramos reflejados en este melancólico y bellísimo espejo llamado Javelin, que promete ser uno de los álbumes más importantes del año.
¿Más ganas de estos enormes discos devastadores? Checa nuestra reseña del también impresionante The Greater Wings de Julie Byrne o la oscuridad trágica de Lankum cruzando el Atlántico a tierras irlandesas. También puedes checar nuestras recomendaciones quincenales de lo más variadas.
Quedate, aquí nos leemos.
