Olivia Rodrigo es una ex-chica de contenido infantil y adolescente. Y es de esas a las que les ha ido bien en la música; siguiendo la estela de Britney Spears, Christina Aguilera, Miley Cyrus, Ariana Grande.
Solo que, como distintivo, Olivia, nacida en Murrieta California en 2003, es como la versión actualizada de la chica alternativa de las estrellas pop, la de la estética Dark y los gustos ‘locos’. Sí, lo de locos lo estoy diciendo con tantita sorna.
Obviamente tenía que conquistar a la Gen Z tan fascinada por lo que se sale del molde, pero no tanto, como Wednesday Addams, oh, she’s so crazy.
Olivia ha subido como la espuma gracias a su estilo pop/rock mainstream de fórmula. Guts es su segundo álbum y se ha convertido en un favorito de los adolescentes y no tan adolescentes. Vamos a revisarlo.
Guts. Todo fríamente calculado. Crítica
Un disco que comience con una canción titulada “All-American Bitch” sin duda debe de ser interesante, y lo es. Abrimos de forma dulce con arpegios de guitarra muy sencillos hasta llegar a un coro que es ¿Avril Lavigne? , no, Olivia grita más y es menos ñoña. Es obvio que la inspiración principal aquí es Paramore aunque dicha banda juega en otra liga. Digamos que la canción está representando a la mujer empoderada de esta década, es un tema que está bien hecho dejándonos en claro su personalidad y lo que vamos a encontrar aquí.
“Bad Idea Right?” Es una combinación entre un sonido con Spoken Word sobre una banda happy punk y el Lollipop pop, o Bubblegum pop, como le gustes llamarle a ese sonido adolescente. Algo que está súper bien hecho es el crescendo a mitad de la canción y las excelentes guitarras. Es como escuchar una mezcla de Blondie con las Spice Girls.
Llegamos a “Vampire” –la nueva “Creep” de Radiohead– con ese piano copiando nota por nota la progresión de acordes de la famosa canción. Esto ya se ha visto con una pista de Lana del Rey a la que los fans de Thom Yorke se le fueron encima, para después descubrir que “Creep” había sido… tomada de una progresión de acordes de The Hollies que, a la vez, se ‘inspiraron’ en la misma progresión tocada por Bach hace algunos siglos.
Lo siento, tenía que hacer el chiste.
Si bien “Vampire” suena tremendamente “Creep” en su inicio, es la mejor canción del álbum. Es una pista que no se queda como una simple balada de piano, si no que va moviéndose y subiendo la velocidad a través de las percusiones y el coro con acompañamiento femenino. La canción se vuelve entonces en una catarsis donde la cantautora termina por todo lo alto. Olivia Rodrigo no escribe todas sus canciones pero varias sí y ésta es una de ellas en colaboración con Dan Nigro.
La letra es la mejor de las composiciones de Guts y retrata de una forma bastante honesta cómo Olivia ha ido madurando y no dejarse fiar por el brillo de la fama entre la gente que la rodea que como siempre, con una estrella en ascenso, son chupa sangres alrededor, es un himno de pop con fuerte carga gótica:
“I’ve made some real big mistakes
But you make the worst one look fine
I should’ve known it was strange
You only come out at night
I used to think I was smart
But you made me look so naive
The way you sold me for parts
As you sunk your teeth into me, oh
Bloodsucker, famefucker
Bleedin’ me dry, like a goddamn vampire”
( He cometido algunos grandes errores, Pero tu haces que lo peor luzca bien, Debí saber que era extraño que solo salgas de noche, Solía pensar que era inteligente, Pero me hiciste lucir tan ingenua, por la forma en que me desarmaste, mientras clavaste tus dientes en mi, chupa sangre, trepador de mierda, desangrandome hasta secarme, como un maldito vampiro)
Si me preguntan, me gusta más que la “Creep” original.
“Lacy” es una canción intimista que se sitúa firmemente dentro del estilo del indie folk y del folk pop. Posee ese aire reminiscente de Taylor Swift en la época del 2020. Aunque no se arriesga a explorar terrenos más vanguardistas del folk, funciona eficazmente dentro del mainstream como una propuesta “alternativa”. También es justo reconocer que la artista muestra intenciones de expandirse en otros géneros musicales.
“Ballad of a Homeschool Girl” vuelve a fusionar elementos del punk con el teen pop. Sin embargo, hay artistas como Indigo de Souza que están haciendo algo similar pero de una manera mucho más impactante. De Souza lanzó este año un excelente álbum que merecería la misma atención mediática que recibe este, dado que su propuesta es superior en varios aspectos.
“Making The Bed” inicialmente da la impresión de ser otra de esas baladas pop que ya nos tienen prácticamente hastiados, con su ambientación new age, su música de elevador y sus tintes de soft rock. Sin embargo, la canción logra salvarse gracias a su encanto particular. A pesar de coquetear con lo que yo considero “pecados” musicales, el tema sorprende gratamente, especialmente en su emocionante parte final, que destaca por un mayor énfasis en la guitarra distorsionada.
En “Logical”, la influencia de Lorde es palpable. Sostenido por un arpegio de guitarra y piano, el tema está bien ejecutado aunque no es particularmente memorable. Si tuviera que describirlo con adjetivos, diría que es bonito y dramático. Aunque suena a algo ya realizado anteriormente, y de mejor manera, no se puede negar su competencia técnica.
Algo curioso sucede cuando pasamos de “Logical” a “Get Him Back”: experimentamos un salto abrupto en el estilo musical que podría describirse como un ‘glitch’ en la continuidad del álbum. “Get Him Back” es, lamentablemente, el tema más superficial y genéricamente pop del disco, con un intento de hip-hop mejor olvidado. El cambio brusco resalta especialmente porque nos lleva al peor tema del álbum.
“Love is Embarrassing” retoma un poco el camino con su sonido pop/rock genérico pero característico. Aunque no es un mal tema, provoca una sensación de déjà vu, como si ya lo hubiéramos experimentado antes. Es un tema corto, y alargarlo más habría hecho que terminarlo se sintiera como una tarea.
“The Grudge” se presenta como una balada clásica del pop, acompañada de piano y arreglos de cuerdas. A pesar de mi aversión hacia las baladas pop mainstream actuales, Olivia muestra un control admirable de su voz, y el tema funciona sorprendentemente bien.
“Pretty isn’t Pretty” me recuerda a “Malibu” de Hole, así como otros temas pop/rock con una vibra veraniega pero nostálgica. Es uno de los mejores tracks del álbum. Aunque no es nada que no hayamos escuchado antes, cumple eficazmente su propósito.
“Teenage Dream” es un buen cierre, balada a piano intimista con arreglos de cuerdas, quizás porque me identifico más con las letras de perdedores o melodramáticas, si me vas a dar melodrama, suéltalo todo. Qué bendición no tener que aguantar en todo el LP una balada de esas New Age. Insisto, hay partes que suenan a ‘esto ya lo escuché’, a mitad del tema hay una sección completamente Lorde y después reventamos en guitarras eléctricas y una batería potente como debe de ser para cerrar track y álbum.
A la medida de la nueva reina del pop adolescente. Post reseña
En esto de la música siempre hay artistas sobrevalorados e infravalorados, hay quienes sin merecerlo logran ser todo un fenómeno y otros que deberían ser ídolos y ni en su pueblo los conocen. No estoy acusando a Olivia Rodrigo de ser exitosa, no es su culpa, al contrario, es un trabajo duro.
Tampoco estoy diciendo que su música sea meh, sin embargo aunque la artista es joven y creo que puede crecer artísticamente bastante, creo que debe de fijar sus prioridades, si va a seguir el camino de artistas como Lorde o Billie Eilish o seguir haciendo canciones de la Miley Cyrus más ingenua como “Party in The USA” antes de salir desnuda en una bola de demolición y espantar puritanos.
El camino está abierto frente a ella, que bueno que la acompaña el éxito popular y gracias de verdad por ese himno de pop gotico que es “Vampire”, yo creo que le gustaría más al propio Radiohead que su “Creep” del 93.
Si después de escuchar este album te quedaste con ganas de escuchar algo parecido y de calidad, tenemos nuestra reseña de Indigo de Souza de All This Will End , si por otro lado lo que quieres es pop puro que no se detenga en baladas y muestre los mejores trucos actuales del género, por aquí Carly Rae Jepsen podría darte un gran momento. Además cada quince días recomendamos música distinta, date un paseo por ahí en nuestras recomendaciones quincenales.
Quédate, aquí nos leemos.
