El año próximo Björk cumplirá treinta años desde que su álbum Debut llegara al mundo y cambiara bastantes paradigmas del pop mainstream al mismo tiempo que abría una brecha que posteriormente la llevaría a alejarse de lo convencional para crear un nombre y reputación siempre a la vanguardia.
Este año Björk ha llegado a la mágica cifra de 10 álbumes lanzados. Lo que en otro artista podría sonar incluso hasta aburrido en Björk es interesante porque nunca sabemos con que nos vamos a topar. ¿Sigue la cantante islandesa innovando muy a su manera ? Velo en esta reseña.
Björk, la reina del Avant-garde
Para dar una repasada rápida antes de entrar en detalles del disco que nos ocupa, Björk es una cantante islandesa nacida el 25 de noviembre de 1965. A los once años lanzó un LP de música infantil en su país, pero sus verdaderos inicios en la música serían en un grupo de punk llamado Kulk, de ahí formaría parte de la banda de alt-pop The Sugarcubes para después empezar su carrera en solitario.
Björk debutó con Debut (valga la redundancia) en 1993 y pondría el mundo del pop de cabeza, la década de los noventa fue fructífera para la cantautora ya que sus posteriores discos Post del ’95 y Homogenic del ’97 serían aclamados por critica y público y considerados obras maestras.
La electrónica y su revolución en los noventa no se puede entender sin Björk formando parte de esa historia. Sería a partir de Homogenic donde Björk se alejaría más y más de los convencionalismos, incluso al punto de que algún sector del público y la critica le dio la espalda ya bien entrados en la década de los 2000, llegando a la burla de ella y su “rareza”, parecía que Björk ya había sido y solo quedaba la burla por parte de algunos sobre todo en 2007 con el punto más flojo de su carrera, el álbum Volta.
Sin embargo Björk resurgió en 2015 con el espectacular Vulnicura que, aprovechando las tecnologías más recientes, acercó a la compositora a una nueva generación, a la que conquistó, y desde entonces la cantante está viviendo un segundo aire e inspirando a varios artistas que en la actualidad son tendencia y reconocen abiertamente su influencia y cariño.Con esto dicho pasemos a hablar de Fossora, su décimo álbum.
Fossora : Más allá de los hongos. Reseña
Björk anunció por sorpresa que su nuevo álbum estaba listo para salir próximamente, la descripción que dio del mismo en una entrevista para NME describía Fossora cómo “Un disco para enterrar los pies en el suelo , es como cavar un hoyo“, al mismo tiempo que apuntaba a su sonido como “Techno Biológico“, el disco, según la creadora, está inspirado en tres cosas muy concretas.
En primer lugar la muerte de su madre, Hildur, una activista hippie defensora de la naturaleza, en segundo la pandemia y “Aquellas fiestas privadas en casa durante el encierro”, y en tercero el mundo subterráneo donde crecen los hongos y que fascinaría a la artista. “Es mi disco de hongos” diría para la misma entrevista de NME. También Björk dijo que este disco estaría lleno de vientos dándole prioridad a instrumentos como el clarinete o las flautas y que al mismo tiempo sería un disco más dance con gran influencia del subgénero del techno hardcore conocido como Gabber.
¿Cumplió Fossora con la descripción sobre la música que íbamos a escuchar en este disco dándole importancia a los instrumentos y movimientos musicales que dijo Björk que encontraríamos en el disco ? NO, O MUY A MEDIAS.
¿Importa en el desarrollo del disco? EN LO ABSOLUTO.
No se que entienda Björk por “Música Dance” pero no me extrañaría que fuera una cosa completamente extraña y alejada de los estándares actuales, ya no es esa Björk de sus dos primeros discos con himnos hechos para clubes, rave y pastillas de extasis, sin embargo el disco abre con lo que se conoce en la música como “A banger “, se trata del primer single, el ya conocido “Atopos“, es una canción potente, bastante potente, sin duda se trata del tema abridor más fuerte en cuanto a ritmo y beats por minuto desde “Army Of Me” del afamado Post del 95.
Y no es que Björk no haya tenido grandes temas abridores de un album, lo que pasa es que varios como ” Hunter“, ” Hidden Place” o “Stonemilker” jugaban más al misterio, al bello uso de cuerdas y ambientes raros. Lo que más se acerca es “Earth Intruders“, canción que abre Volta, pero ni siquiera esa canción abraza a la locura hecha beats como “Atopos” en su parte final.
La canción tiene una línea de bajo creada por los clarinetes bajos (O Bass Clarinet)que le dan una atmósfera opresiva pero que se deja oír, incluso llega a ser pegadizo el ritmo de las drum machines manejadas por Gabber Modus Operandi, sin embargo al tiempo que los clarinetes van cambiando a tonos más graves y Björk suelta la última parte de la letra empieza el golpeteo incesante, un ataque tras otro y no mentiré, sí se siente dance, a un ritmo frenetico pero dance.
La letra está basada en lo que el filósofo francés Roland Barthes describió como el inclasificable otros; “nuestras diferencias son irrelevantes, nuestra unión es más fuerte que nosotros mismos”.
Parece que Björk nos va a dar ese disco de dance del que tanto hablaba, pero entra “Ovule“, una canción producida por El Guincho que abre con unos hermosos metales: trombones trompetas y tubas es lo que escuchamos, mientras Björk empieza el tema casi susurrado, me recuerda a “Cocoon” de Vespertine (2001), sin embargo a medida que avanza la canción ésta va adquiriendo más velocidad pero sin llegar a explotar del todo, de nuevo las drum machines hacen un trabajo sobresaliente,con un sonido cercano al afrobeat, dándole más consistencia a una canción que es maravillosa, la voz de Björk suena bellísima sobre todo en un puente a media canción.
La letra de “Ovule” es un tema de amor con ligeras metáforas a la menstruación (De ahí el nombre) ,la parte más emocionante donde se unen música y letra es “When I was a girl, I felt love was a building,I marched towards, but deadly demonic divorces demolished the ideal” (Cuando era más jóven sentí que el amor era un edificio hacia el cual marché, pero fatales y demoníacos divorcios demolieron el ideal), en ese momento llega un subidón que dura pocos segundos pero emociona bastante, escuchamos a Bjork en pleno dominio de su arte y estilo. Una joya.
Los siguientes dos temas están muy emparentados con Medulla del 2004, ese sorprendente álbum de Björk que solo usaba un instrumento para todo el disco: La voz humana. “Mycelia” es un compilado de voces humanas en todas las formas, desde sintetizadores, cintas y sampleos pasando por voces reales y vocoders que representan las fibras que estructuran un hongo, el cambio de velocidad de las voces nos dan a entender su crecimiento bajo el suelo, el ejercicio aunque breve posee una buena estructura.
“Sorrowfull Soil” es una cascada de voces entrando a capella que va adquiriendo cuerpo hasta volverse emocionante y distorsionada gracias a un vocoder. Esta es la primera vez en el album que nos topamos con la muerte de la madre de Björk en la letra y en realidad solo nos prepara para el track siguiente.
Un gong nos da la bienvenida a “Ancestress” y, a excepción de Medulla, no podría ser un disco de Björk sin el uso de los arreglos de cuerdas, estos poseen (más que ninguno en el disco) una grandeza que no cabe aquí, los arreglos son cinematográficos, imperiales.
Björk nos va contando la relación entre ella y su madre empezando por los primeros versos donde desarrolla la idea de ser quien organice el ritual funerario de su madre y lo que diría en ese momento, la música orquestal es poderosa en su mensaje para la canción más larga del album y su tema más personal. Tenemos cajas de ritmo industriales e instrumentos percusivos metálicos, mientras en los coros se encuentra Sindri, el hijo de Björk.
“Ancestress” es una canción que emana una fortaleza femenina como muy pocas últimamente, Björk de manera melancólica pero reflexiva se despide de su madre al mismo tiempo que asume el lugar que sus ancestras le han dejado como la nueva cabeza de una familia de mujeres fuertes, el tema enchina la piel, las cuerdas rechinan dolorosamente y la letra recuerda los últimos momentos de una mujer con gran respeto:
“The machine of her breathed, All night while she rested, Revealed her resilience, And then it didn’t”
(Su máquina respiraba, toda la noche,mientras descansaba,revelando su resiliencia y entonces no lo hizo).
“Fajurt Er í Fjördum” es un tema brevísimo, un viejo poema islandés donde la voz de Björk es solo acompañada por un órgano, después llega “Victimhood“, que inicia con unos cellos y microbeats para después dejar caer suaves oleajes eléctricos, es un tema oscuro que llega a la primera mitad para que aparezcan los clarinetes llevando una melodía bastante bien ejecutada, es un tema que se cuestiona lo que está bien o mal intentando ser la víctima o el victimario, el tema va en franca ascendencia poco a poco creando un climax cerrado y opresivo para terminar en un ambiente claustrofobico de sintetizadores.
Pero aquí falta algo… ¿ Y los hongos? “Allow” nos da la bienvenida a esta fantasía de opereta de clarinetes y flautas, musicalmente es el tema más dulce del álbum, podemos escuchar a través de este track el camino por un bosque de verde pasto y pinos, es una fantasía mágica, no solo la música sino la letra que habla cómo Björk se trepó a las copas de los árboles entre ramas de magia imposible, las cuerdas y los instrumentos de viento se unen en una fantasía que bien podría sonar en la comarca de la Tierra Media, este hermoso y hasta un poco ingenuo tema nos da paso a “Fungal City“.
Por fin el camino del bosque bajo tierra nos ha llevado a la ciudad de los hongos con música de cuento de hadas cuyos coros (con el invitado Serpentwithfeet) se convierten en una mezcla entre musical y cajas (tarolas) industriales, sin embargo lo más sorprendente de este tema es su atmósfera. Misma que se enriquece con los efectos de sonido provistos por picos y palas mineras que no se detienen. En esta ciudad subterránea no existe el descanso para obtener los mejores hongos.
“Trölla- Gabba” es el aftermath, la consecuencia de visitar la ciudad de los hongos sin medir consecuencias, es un tema industrial de voces y coros disonantes combinado con un caos electrónico que rebota y lleva de arriba hacia abajo al oyente, todo esto en dos minutos que ojalá hubieran sido más.
“Freefall” es una canción bastante serena, adornada por los vientos y cuerdas, que le dan un sentimiento digno de una escena cumbre y dramática de un musical ya que a mitad del tema escuchamos como los cellos, violas y violines se dejan la piel en su monumental crescendo, solo para que después los violines sean punteados (Tocados con los dedos en vez del arco) dándole un sentido de urgencia, vaya destreza de los músicos que acompañan a Bjork en este tema ya que demuestran su agilidad de una manera bastante digna y meritoria.
Llegamos así al tema que le da nombre al disco “Fossora“. Abre con trompetas como una marcha triunfante que será lo que escuchemos como base del track, “Fossor” en latín significa “Cavador” , Fossora es una palabra inventada por Björk que da a entender la feminización de la palabra que en este caso sería ” Cavadora” o ” La que cava”.
A la marcha triunfante de vientos se le une una percusión industrial que pronto explotará a la mitad del tema en Gabber, si en “Atopos” los beats hardcore eran trepidantes, aquí se escuchan ir a todos lados de una forma circular, “At last We stayed in one place long enough to shoot down deep hyphae roots that penetrate concrete and plastic ” (“Al final nos quedamos en un lugar el tiempo suficiente para derribar profundas raíces de hifas que penetran el hormigón y el plástico”).
La canción estalla en un frenesí donde a pesar de escuchar los beats desenfrenados podemos escuchar como los instrumentos de viento hacen hermosas figuras, la canción es un festín donde se junta mejor que en ninguna otra canción del album la promesa de la fusión de los vientos con los beats hardcore. Es mi favorita sin duda y está a la altura de que el album completo lleve su nombre.
Llegamos al tema final, un tema emotivo que es como una nana entre Björk y su hija Isadora “Her Mother’s House” un tema sobre el paso de mujer a mujer en las generaciones por venir donde Björk nos cuenta como su hija que se ha independizado siempre será bienvenida a su casa así como su madre lo permitió antes de ella y la madre de su madre antes de ella.Es un tema conmovedor con unos arreglos vocales y coros de Isadora y musicalmente es minimalista para lo que hemos escuchado antes con hermosas figuras de clarinete y arreglos de cuerdas. Es un canto que va apagandose de una forma bellísima entre la noche y la luz del nuevo día.
Fossora es un material imprescindible del 2022. Conclusiones finales.
Esa joven de 1993 tímida e introvertida jamás se imaginó que iba a cambiar el destino de la música con sus tres posteriores LP: Post , Homogenic y Vespertine. Jamás se imaginó lo que le debe el actual pop, la electrónica y ser la cara más reconocible de la música avant-garde experimentando siempre con recursos tan básicos y a las vez complicados como hacer un disco donde todos los instrumentos fueran la voz humana como lo hizo en Medulla .
Después de convertirse para muchos en una burla,en 2015 regresaría con uno de los mejores discos de rompimiento sentimental de la historia como Vulnicura y de ser joven ahora era una mujer madura que después dió un difícil album sobre la paz tanto mental como del entorno llamado Utopía , ahora a esa ola de regreso se une uno de los mejores discos sobre el duelo y cómo lidiar con él, y ese disco se llama Fossora.
Björk quizás como las grandes figuras de la música tal vez ya esté más allá del bien y el mal y con Fossora crea un album que sin ser conceptual del todo nos guía por un camino: La percepción de lo terrenal ,el duelo, la forma de lidiar con él a través de algo que le lleve a nuevas direcciones ,en este caso su experiencia con los hongos , y finalmente poner los pies en la tierra para encabezar un hogar como la figura matriarcal que ahora es y quedarse atada al suelo y ver por las generaciones que le siguen, no solo sus familiares si no la gente joven que la tiene como una de sus grandes influencias.
Si eso no es un viaje completo de descubrimiento en estos días confusos en los que vivimos, no se que lo sea. Fossora es un disco casi intachable y uno de los mejores discos del 2022.
Si llegaste a columna musical buscando a Björk y además tienes ganas de descubrir más música experimental y que te brinde una forma diferente de comprender la música tal vez nuestra reseña de Barbarism de Katie Alice Greer te gustará , también Sam Prekop & John McEntire podría llevarte más por los caminos del avant garde.
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