Hoy tenemos para ti la historia de una canción que se encuentra entre las favoritas de los rockeros. Se trata de “Dancing In The Dark” de Bruce Springsteen, acompáñanos a escucharla.

Los primeros años de la década de los ochenta se caracterizaron por una atmósfera de melancolía e introspección para “The Boss” Bruce Springsteen, a quien le dedicamos un especial con diez canciones seleccionadas de su discografía aquí. En ese tiempo, Springsteen se dedicó a explorar las tristes realidades de la América profunda.

Aunque ya se había consagrado como una superestrella del rock en Estados Unidos, Springsteen no optó por el camino fácil de repetir la fórmula de Born To Run una y otra vez. En cambio, como los grandes artistas, decidió explorar otras temáticas y perspectivas de la clase obrera americana.

En 1980 lanzó el melancólico The River, y en 1982 presentó el álbum más sombrío y desolador de su discografía, Nebraska, cargado de una atmósfera fría y nevada. Con ambos trabajos, más orientados al folk y aclamados como obras maestras, Springsteen demostró que podía abordar lo que le inquietaba, sin dejar de ser uno de los grandes nombres de la música norteamericana.

En 1984, Bruce Springsteen se encontraba grabando un nuevo álbum, gozando de una reputación artística intachable. Sin embargo, nadie podría haber anticipado el impresionante éxito que el artista iba a lograr al dar un giro de 180 grados desde el melancólico e introspectivo Nebraska, para crear un álbum de arena rock, el más grandioso y accesible de su carrera: Born In The U.S.A. Para inaugurar este nuevo camino, Springsteen eligió la primera canción de pop que crearía en su carrera: “Dancing In The Dark”.

Y con “pop” no me refiero a que The Boss se abalanzara sobre la música synth-pop que reinaba la época o las baladas cursis que también dominaban las listas. No, lo que hizo es por primera vez incluir sintetizadores a su manera para un ritmo alegre alimentado con una melodía sencilla y animada cortesía de él mismo y The E Street Band, pero hagamos un poco de historia.

“Dancing In The Dark” el hit necesario

Es evidente que Springsteen vivió un periodo muy personal e introspectivo a inicios de los ochenta, pero en medio de ello, el músico empezó a perder presencia en la radio. No obstante, cuando comenzó a trabajar con su banda en lo que posteriormente sería Born In The U.S.A en 1984, Bruce decidió que este debía ser un álbum con canciones más grandiosas, diseñadas para volver a los focos, y no precisamente porque la discográfica se lo pidiera (que sí lo hizo), sino porque, después de su periodo introspectivo, logró salir de la depresión que le había causado esa etapa.

De este modo, Springsteen estaba listo para hacer himnos de rock que llenaran estadios. Sin embargo, no quería volver al estilo de rock más pesado de Born To Run, sino que buscaba hacer canciones más depuradas (o más ligeras) en su estilo musical, heredado del blues tradicional.

En este punto, Jon Landau, productor y representante de Bruce Springsteen, le pidió casi con el disco terminado incluir una canción “de hit” para su debut. En un principio, Springsteen se negó; sin embargo, Landau ya había influido en algunas decisiones de Born In The U.S.A, como la inclusión de más sintetizadores en los temas, aunque siempre respetando la visión creativa predominante de The E Street Band.

Finalmente Springsteen cedió y en tiempo récord entregó “Dancing In The Dark”, titulada así de manera un poco sarcástica porque era como Bruce se sintió con la presión de escribirla “Dirigiendome directamente al pop, como bailando en la oscuridad , declararía en su libro de memorias Born To Run.

Pero si algo Springsteen nos ha demostrado en toda su carrera ha sido una clase constante en sus temas, y “Dancing In The Dark” no iba a ser una vulgar canción de pop descafeinada. A pesar de su sensación de ir a tientas en un género que le era familiar pero que no dominaba, la canción resultó un clásico instantáneo y una de las mejores de toda la carrera de The Boss.

“Dancing In The Dark” debutó el 3 de mayo de 1984 como adelanto del nuevo disco de Bruce Springsteen. El público de inmediato reconoció el potencial del tema como un hit; la canción se mantuvo durante 4 semanas en el número 2 del Billboard y tardó meses en salir del top 10.

En esta obra, el inicio es marcado por un tambor batiente y un riff de sintetizador acompañado de una línea de bajo simple pero potente que amarra el ritmo resultante. Una guitarra rítmica remata los acordes mientras otra arpegea. La atención se centra en dos sintetizadores: uno que se utiliza para hacer el pegajoso y reconocible riff y otro que deja las notas de acordes largas. Y, por supuesto, destaca la voz de Bruce Springsteen, que en el primer verso narra su hastío y cansancio durante las grabaciones del disco y de esta canción, pero en el coro suena más animado que nunca en años:

“You can’t start a fire, You can’t start a fire without a spark ,This gun’s for hire ,Even if we’re just dancin’ in the dark”

(No puedes comenzar un incendio, no puedes comenzar un incendio sin una chispa, este pistolero está en alquiler, aún cuando solo estemos bailando en la oscuridad)

A lo largo de la canción, tenemos variaciones del coro con la adición de palabras, aunque el remate lírico y vocal sea el mismo. Justo para el último tercio de la canción, el fallecido y muy reconocido saxofonista Clarence Clemons, miembro de The E Street Band y músico de sesión en decenas de canciones de otros artistas, nos entrega un sensacional solo de saxofón que nos acompaña hasta el final del tema. Clemons ya venía desde la mitad de la canción jugando con pequeñas figuras de su instrumento, pero su momento de brillo, que convierte la canción en algo aún más épico, es en su solo, hasta que nos vamos al fade out.

El video de la canción fue grabado por el reconocido cineasta Brian de Palma y contamos con una super joven Courteney Cox (Sí, la misma de la saga Scream) a quien Bruce invita a subir a bailar en el escenario, el vídeo así como la canción es todo un clásico.

¿Qué opinas de “Dancing In The Dark”?

Born in the U.S.A., el álbum, debutó el 4 de junio de 1984, precedido del enorme éxito de “Dancing in the Dark”. La aclamación crítica y el entusiasmo del público fueron unánimes, convirtiéndose en su álbum más vendido y uno de los más vendidos del rock. La canción que da título al LP, por razones equivocadas, se convertiría en uno de los himnos más patrióticos americanos, especialmente entre la gente de derecha que malinterpretó la agria crítica a la guerra de Vietnam que contiene la canción. Pero esa ya es otra historia.

En columna musical seguiremos trayendo más contenido sobre canciones icónicas y sus historias detras. Así como también contenido específico sobre ciertos artistas consagrados como en el caso de Bruce Springsteen, también tenemos otros artistas que han merecido hablar de ellos y sus canciones.

Aqui nos leemos.