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AC/DC: 45 años del disco Let There Be Rock

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Hoy en día, cuando escuchamos la noticia de que la banda de origen australiano, AD/DC, se presentará en algún festival musical, generalmente sabemos que ellos serán los estelares del evento. O si anuncian alguna gira internacional, es prácticamente un hecho que el venue estará repleto y casi a punto de reventar. Pero durante el inicio de su trayectoria, atravesaban un periodo de incertidumbre y un disco ayudó a que continuaran con su carrera, ese álbum fue Let There Be Rock del año 1977.

AC/DC vs. el punk

El estilo musical de AC/DC es reconocible en cualquier parte. Sus canciones son fuertes, pesadas en las guitarras, cuentan con riffs icónicos, con un ritmo veloz marcado por la batería y, sobretodo, por las rasposas voces de los distintos vocalistas que han pasado por sus filas. Su sonido es la perfecta definición de rock pesado o hard rock y cualquiera de sus canciones tienen la energía suficiente para hacer saltar a todo el público en uno de sus conciertos.

AC/DC en 1976
AC/DC (1976)

El origen de la banda AC/DC nos remonta a la primera mitad de la década de los setenta. Los hermanos Malcom y Angus Young iniciaron con la primera iteración del grupo en 1973 y fue así que comenzaron a hacerse de un nombre en las estaciones de radio, primero en su país natal y luego en el Reino Unido.

Su estilo pesado contrastó con la música de moda de inicios de los setenta, me refiero al punk británico. Esa “lucha de estilos musicales” causó mucha molestia en la banda, sobretodo durante entrevistas en las que incluso se llegaron a retirar cuando eran cuestionados sobre su opinión del punk o cuando mencionaban que ellos pertenecían a ese movimiento.

A AC/CD le costó un poco de esfuerzo el que su música fuera aceptada en los Estados Unidos, lo que derivó a que tuvieran constantes discusiones con su disquera, Atlantic Records, quienes estaban dispuestos a cerrar su contrato con ellos. El público parecía preferir música de la llamada “ola británica de punk” que un sonido más pesado, pero fue justo eso lo que los motivó a que su próximo disco fuera toda una oda al hard rock.

¡Que se haga el Rock!

Let There Be Rock es el cuarto álbum de estudio en la carrera de AC/DC y uno de sus más importantes por varios factores. De entrada, fue el último en el que participó el bajista Mark Evans, fue separado del grupo unas semanas después de su lanzamiento debido a diferencias creativas y algunas discusiones con Angus

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Como claro ejemplo de cómo ha cambiado la producción musical de un álbum en nuestra época, Let There Be Rock se grabó durante los meses de enero y febrero de 1977, y se estrenó en Australia el 21 de marzo del mismo año. Aunque las canciones ya las habían comenzado a trabajar durante su tiempo libre en una gira previa, se grabó en un transcurso de pocas semanas, y el resultado fue espectacular.

Let There Be Rock está considerado entre los mejores álbumes de hard rock de la historia. De inicio a fin, cada uno de sus tracks emite la fuerza y energía necesaria que debería tener cualquier canción que se denomine de rock. Son 41 minutos y un segundo de adrenalina pura a lo largo de ocho canciones. Además, todos los integrantes se escuchan en una de sus etapas más creativas y en la cima de su talento, como bien podemos escuchar en la interpretación de Bon Scott quien nos presenta algunas de sus mejores canciones de su trayectoria.

Todas las canciones del disco fueron compuestas por los hermanos Agnus y Malcolm Young, y por el vocalista Bon Scott.

Go Down

El disco inicia con la canción “Go Down”, la cual no es una de las canciones más conocidas de AC/DC pero sí es un tema muy divertido para iniciar un álbum. Es una canción “juguetona” con raíces en el blues y con un coro pegador, trata sobre un encuentro amoroso y cuenta con varios juegos de palabras sobre el pasional tema. 

Dog Eat Dog

Dog Eat Dog” es el segundo track del álbum y es una canción que tiene un estilo mucho más parecido al sonido clásico de AC/DC donde la fuerza recae en su mayoría en la voz de Scott hasta que llega el momento del solo de guitarra que acapara la atención brevemente.

Su letra habla sobre la ambición y la competencia en el humano haciendo metáfora y comparándolos con perros hambrientos. Esto pudo haber sido el resultado de su malestar con su disquera después de los comentarios que les hicieron por su falta de ventas en los Estados Unidos. A continuación vemos una versión en vivo de 1978.

Let There Be Rock

La canción que le da el título al álbum, la puedo considerar entre las mejores de la carrera de AC/DC. Es un himno y homenaje no sólo al hard rock, sino al rock and roll en general. La letra menciona por medio de metáforas religiosas el origen divino del rock, donde se compara su creación tal como ocurre en las primeras páginas del Génesis de la Biblia, de ahí que su video oficial se haya filmado en una iglesia. Y a pesar de que la banda estaba en contra del punk en su momento, el rápido ritmo de la canción en su riff de introducción me suena muy similar a dicho género.

El disco cuenta con otros interesantes tracks que tampoco son de los más populares entre los fans de AC/DC, pero bien vale la pena escucharlas: “Bad Boy Boogie”, “Problem Child” y “Hell Ain’t a Bad Place To Be”. Pero sin duda alguna, la canción más popular del disco es el octavo y último track.

Whole Lotta Rosie

El álbum cierra con el tema “Whole Lotta Rosie”, una canción que es regular en los conciertos en vivo de la banda y, de hecho, ha estado presente en todos sus discos grabados en vivo.

Cuenta la leyenda, en las propias palabras de los integrantes de AC/DC, que una noche después de un concierto en Tasmania, Scott decidió acudir a un bar cercano para seguir la fiesta y fue ahí donde conoció a una mujer llamada Rosie. Esta mujer era un poco pesada y su descripción corporal está descrita en la letra de la canción. El vocalista despertó a la mañana siguiente junto a la mujer, quien presumía haber tenido 28 encuentros con personas famosas durante las últimas semanas, y Scott había sido el número 29.

A pesar de que su origen se remonta a los setenta, AC/DC logró consagrarse como grupo importante en la industria musical en la década de los ochenta, gracias a que lograron superar muchos problemas, incluyendo el fallecimiento de Scott, y a que mantuvieron su esencia y estilo durante el resto de su carrera.

Es increíble pensar que ya han transcurrido 45 años de Let There Be Rock, ya que prácticamente no ha envejecido y su energía se mantiene igual de potente que la que emitió durante su lanzamiento en 1977. ¡Que se haga el Rock!

AC DC En vivo

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